Cuando los motores diésel empezaron a popularizarse años atrás no nos pensábamos que hoy en día su eficacia estuviera bajo sospecha. ¿Qué ha sucedido con estos nuevos combustibles? Conocer qué tipos de problemáticas son las más comunes nos puede ayudar a tener un buen mantenimiento de nuestro vehículo para evitar que cualquier avería técnica se entrometa en nuestra vida. Además, si conocemos lo que no funciona podemos plantearnos incluso arreglar el problema nosotros mismos: por ejemplo, en plataformas como DAPARTO podrás encontrar todos los recambios online que quieras para que puedas evitar llevar el coche al taller.
1. Mala calidad del gasóleo
Los motores diésel modernos tienen un mayor porcentaje de biodiésel que genera fallos endémicos en este tipo de motores. En el momento en que la fabricación de estos autos era la moda, los materiales que se utilizaban sólo admitían unos porcentajes de biodiésel por debajo del 2% cuando en la actualidad el mínimo es del 3%; vaya, que los fabricantes utilizaban elementos más baratos para su fabricación. Lo que ocurre es que el biodiésel lubrica peor que el gasóleo 100% destilado del petróleo y, además, ataca algunos componentes, por lo que puede ser perjudicial para la seguridad de nuestro coche.
2. Averías debido a los sistemas anticontaminacion diésel
Para que un coche diésel contamine menos deben fabricarse con un sistema químico interno que procese los gases y los haga menos perjudiciales, añadiendo más piezas al motor. Por lógica, como más piezas haya más posibilidad hay que el auto pueda sufrir alguna avería en cualquier momento.
3. Inyectores
Los inyectores son los elementos encargados de suministrar la cantidad necesaria de carburante al motor para que se realice la combustión. Al trabajar con presiones muy elevadas y tener un poder lubricante menor, las piezas pueden desgastarse con más facilidad, además de dejar de pulverizar bien el combustible y verter mucho al circuito de retorno.
4. Filtro de partículas
Sirve para atrapar las partículas cancerígenas que emiten los diésel, pero su instalación provoca daños colaterales como la obstrucción del mismo filtro.
5. Bombas de alta presión
Su impacto también tiene que ver con la calidad del gasóleo, y es que la falta de lubricación de las bombas de alta presión hace que se eleve desde los 2 o 3 bares comparado con lo que recibe el gasóleo desde el depósito hasta los 2.000-2.500 bares de presión de trabajo en la rampa de inyección.