En la ejecución de nuestra estrategia de marketing existe la posibilidad de que un conjunto de eventos nos haga perder la probabilidad de éxito, siento el retargeting el punto más inclemente. Esto se debe a los siguientes motivos:
- Las métricas equivocadas y las tecnologías toman el control de los procesos: Esto ocurre cuando efectuamos un medio automatizado de hacer campañas y nos centramos únicamente en el retoro a corto plazo.
- Olvidamos que dirigimos a personas: Es común que cuando nos dirigimos a audiencias de considerable volumen, las personas se conviertan únicamente en ‘números’, pasando por alto la necesidad de conocerlas para efectuar una venta. De hecho, obviamos que toman el tiempo para decidir la compra, adquiriendo un comportamiento similar al nuestro.
Es inminente la significativa perdida de perspectiva. Colocamos en marcha una campaña bajo cierta estructura lógica, invertimos, estudiamos los resultados y procuramos optimizarlo según nuestra perspectiva –que no significa que consideramos la del cliente-.
Por más racional que se lea, en la práctica, las cosas no funcionan de esta manera. Las personas poseen comportamientos y necesidades independientes. Es preciso que hilemos a profundidad, porque los sistemas automatizados no se harán cargo de ello.
¿Cómo se determina la eficiencia del retargeting?
La manera más óptima de comprobar si las campañas de retargeting son efectivas es a través del incrementality. Recalcamos que el retargeting es la técnica del marketing online focalizada en impactar a los usuarios que han interactuado de forma previa con una marca. Por lo tanto, lo más probable es que lo hayas experimentado en más de una ocasión al visitar una página web para consultar información sobre un producto y encontrarte el mismo producto en otros sitios.
El retargeting tiene una función práctica para las marcas. Es la forma más óptima de conseguir personas interesadas y que efectúen la compra del producto. Al no configurar correctamente nuestras campañas, de paso de adquirir un ROI inferior al deseado, generaremos una experiencia negativa en el cliente, y, por lo tanto, dañaremos nuestra marca.
¿Por qué es importante trabajar en el retargeting?
Los anuncios orientados al retargeting, por obligatoriedad, deben ser diferentes a los que trajeron al usuario por primera vez. Mediante la lista de remarketing, o bien, de las cookies de quienes nos visitaron, podemos identificar a los usuarios. Puede ser diseñado por días, edad, página de destino, países, etc.
La importancia del retargeting se centra en el aumento de presencia de la marca. A través de ésta técnica incidimos a los usuarios que no llegaron a culminar el proceso, por lo que recordamos que aún estamos presente ante ellos. Así podemos hacer más presente nuestra marca a los usuarios, lo que nos hará estar más cerca de que el cliente potencial pueda concluir con el proceso que dejó a medias.
Si la acción está correctamente definida, aumentará significativamente nuestro ROI. Con la misma inversión podremos obtener mejores resultados. Esto nos permitirá incrementar la eficacia de nuestra campaña y cerrar ventas que, en otras circunstancias, pudimos considerablemente haber dejado pasar.