Las hamburguesas son sin lugar a dudas, una de las comidas favoritas en todo el mundo; pues integran diversos ingredientes a la perfección, brindando un delicioso sabor que a muchos encanta. No es de sorprender, que se trate de una de las comidas más vendidas en muchas regiones y países.
Pero para muchos empresarios, no basta con el éxito que han tenido, elaborándolas de manera tradicional; por lo que han optado por dar un paso más allá, adaptando las nuevas tecnologías para ofrecer un verdadero espectáculo a los comensales.
La tecnología a la orden del día
Los avances en cuanto a la tecnología, se han convertido en parte fundamental del día a día, con la integración de las mismas a cada vez, un número mayor, de ámbitos, que van desde lo más simple hasta lo más complejo.
Parte de esta nueva ola 2.0 se encuentra la industria de los alimentos; pues se valen de las mismas para facilitar todos sus procedimientos, lo cual se traduce en un ahorro significativo de tiempo y de dinero. Además de hacer que todo sea mucho más simple.
En este caso en particular, el trabajo de los ingenieros se avocó en crear una máquina que cuenta con un total de 20 microcomputadores junto con 350 sensores, que permite elaborar hasta 120 hamburguesas completas en un período de una hora, sin ameritar intervención humana alguna.
Varios especialistas de diversas áreas, participaron en la creación, diseño y elaboración de esta máquina, capaz de hacer hamburguesas en corto tiempo, sin que ello implique sacrificio alguno en cuento al sabor y la calidad.
Un show completo
En San Francisco, se encuentra un novedoso restaurante que ha sabido aprovechar las nuevas creaciones, adecuando una máquina, capaz de elaborar las hamburguesas con una alta calidad y con un coste mínimo de energía.
El nombre de este revolucionario local, es Creator, en donde se expone una gran maquinaría que casi alcanza los 6 metros de longitud, en los que se puede apreciar un verdadero espectáculo en en que se combina la ingeniería, con el arte culinario.
A través de este equipo, se puede ver una hilera llena de panes, pues todas las piezas están elaboradas con materiales transparentes, que permiten tener una completa visibilidad, lo que hace de este un atractivo espectáculo para ver.
El resto de los tubos contienen todos los elementos que pueden llevar las hamburguesas, como los diferentes vegetales y condimentos, para que cada quien escoja la mejor combinación, a gusto personal, por un precio bastante accesible, pues con tan sólo 6 dólares se puede adquirir una hamburguesa.
Se pueden ver los panes recién horneados, dispuestos en una hilera, a través de la cual se ve como se mueven para ser cortados por la máquina. Luego se añade la carne, la cual se prepara frente a todos, cocinada en fibras verticales y libre de hormonas.
Todos los vegetales son frescos y se cortan al instante con una precisión milimétrica, la misma con la que se colocan las diferentes salsas, completando el armado de las hamburguesas en un corto tiempo, para poder disfrutar.
Una industria creciente
Este tipo de equipos para elaborar alimentos como si de líneas de ensamblaje se tratase, ha tenido una muy buena acogida por parte tanto de los negocios de comida, como por parte de los consumidores, quienes han disfrutado enormemente ver de primera mano todo el proceso.
A este nuevo estilo de hacer comida, se han unido empresas dedicada a otros tipos de alimentos, como Zume Pizza, que integro a su equipo, un robot capaz de armar las pizzas en frente de los comensales, brindando un show que acompaña sus comidas.
Spyce es otro de los ejemplos a citar por obligación, pues se trata de uno de los pioneros de este estilo. Ubicado en Boston, en este restaurante permite hacer los pedidos a través de unas pantallas LED, en las que se escogen los ingredientes al gusto para preparar deliciosos bowls.
¿El futuro de la comida?
Si bien, estas opciones son muy atractivas, seguramente no se convertirán en el principal método para la preparación de comidas, al menos no, en un futuro cercano, e incluso tampoco a mediano plazo; pues la experiencia de la comida preparada por un chef, requiere mucho más que técnica.
En estos casos, parte del alma, el cariño y la sazón, están presentes, lo que los robots no pueden lograr, incluso los más sofisticados. Por lo que, por ahora, hablar de un reemplazo de los humanos, por robots, en el mundo culinario, queda fuera de mesa.