La opción intermedia entre el coche nuevo y el de segunda mano que gana adeptos
Un coche de km0 en síntesis es un coche nuevo que ya ha sido matriculado por el concesionario o el propio fabricante, pero que no está usado. De hecho no debería tener más de 100 kilómetros, el rodaje máximo habitual para llevarlo hasta el concesionario en el que se pondrá a la venta. Es por tanto un coche nuevo, pero más barato, generalmente entre un 15% y un 20% más económico que el mismo modelo sin matricular (la media está en unos 3.000€ de ahorro).
Si te interesa echar un vistazo a vehículos km 0 en Santiago de Compostela o en cualquier punto de Galicia, Grupo Breogán es un buen ejemplo de concesionario con infinidad de opciones de vehículos km0. Porque no es sólo una cuestión de marcas, sino también de tantear qué segmento es el que realmente necesitamos y estar abierto a opciones que quizás no habíamos barajado. Por ejemplo, si el vehículo lleva ya un cierto tiempo matriculado, su precio habrá bajado.
Cuáles son las ventajas de comprar un km0
Básicamente lo que hay que considerar es que estamos comprando un coche nuevo, que no ha tenido uso por un particular. Es un vehículo cuyas piezas están intactas. Y por otro lado, hay que tomar en consideración la rapidez de la compra. Cuando se adquiere un vehículo nuevo, generalmente hay que esperar a que llegue de fábrica el modelo con los acabados y extras solicitados y luego matricularlo, en un proceso que se alarga muchos meses. Cuando se adquiere en un concesionario un coche km0, sólo tenemos que elegir cuál queremos y llevárnoslo a casa. El único trámite necesario es el traspaso de la documentación al nombre del comprador.
Cierto es que en la otra cara de la moneda está el hecho de que no hay esa flexibilidad para poder elegir todos los detalles, pero para solventar eso basta con dirigirse a un gran concesionario, donde probablemente tendrán tal variedad de opciones que no será difícil dar con la que encaja a nuestros deseos. Siempre hay algún detalle que puede fallar; quizás la unidad que localizamos no tiene un extra deseado o no es del color que se buscaba. De todas formas, una vez adquiramos el coche, podemos ir añadiendo estos extras que nos gustan con el tiempo, en cualquier taller especializado.
Otro detalle a tomar en consideración es el de la garantía, puesto que comienza a contar de cara a la marca desde que se matricula el vehículo, por tanto el tiempo que lleve ese vehículo matriculado esperando en concesionario será tiempo de garantía que se pierde. Pero no olvidemos que un concesionario serio ofrece también al cliente su propio periodo de garantía de compra.
¿Y por qué ese coche está ya matriculado?
No hay ninguna razón que tenga que ver con argumentos negativos en este aspecto para el vehículo. La explicación es sencilla. A los concesionarios oficiales les interesa a finales de año matricular algunas unidades para que las cifras al cerrar el año les encajen con los números que tenían previstos, y porque un vehículo demasiado tiempo sin registrar de esta forma, se devalúa. Así que no hay nada de extraño en estas unidades, son vehículos a estrenar sin ningún desperfecto que al concesionario le interesa vender lo antes posible.
En definitiva, por todas estas razones el vehículo km0 gana cada vez más seguidores. Se presentan como una alternativa muy interesante al vehículo completamente nuevo. Es más barato y hace competencia al vehículo de segunda mano, que, aunque puede ser otra opción bastante buena genera cierta desconfianza en el comprador al estar adquiriendo un producto usado.