Uno de los productos más consumidos en el mundo entero tiene que ser el café. Una gran cantidad de culturas lo tienen dentro de sus costumbres, además, el cultivo, procesamiento y preparación siempre es diferente en cada lugar. Esto, es lo que hace que sea diferente y que sepa distinto en cada momento.
Puede que hayas ido a una cafetería y te gustase mucho el sabor de un café que has probado y te estés preguntando cómo fue que lo hicieron. Pues la verdad, preparar un buen café tiene sus secretos algunos mencionan que hay que utilizar las mejores cafeteras automáticas, otros piensan que el secreto está en el café y en la forma de prepararlo en sí mismo.
Pero calma, que no es nada demasiado complicado. Aquí te explicaremos todas esas cosas que tienes que saber para poder preparar un buen café en casa.
Compra el mejor café
La preparación de un buen café inicia cuando empleas los mejores ingredientes para su creación. Utilizar un café barato o de mala calidad lo que terminará haciendo es que no sepa tan bien como debería. Y si quieres tomar algo delicioso por las mañanas o en las tardes, deberás invertir un poco más.
Puede que todo el café que veas comercializado te parezca interesante pues tiene diferentes aditivos que hacen al café “mucho más delicioso” pero de eso nada, lo que te dará el verdadero sabor del café es uno que sea 100% natural. Debes cerciorarte que el único ingrediente que tenga la bolsa de café que hayas comprado sea café, si no, quizá no sea la mejor alternativa para ti.
Compra una buena cafetera
Es prácticamente indispensable tener una buena cafetera en casa para preparar el mejor café. Existen formas un poco más artesanales de prepararlo, pero tener una cafetera automática es una buena opción. Esto tiene diferentes beneficios, el primero de ellos es que hace el proceso de preparación del café mucho más sencillo, la máquina lo hace todo.
Por otra parte, la temperatura del agua es la correcta, podrás medir las cantidades de agua y café que deseas colocar para así controlar el sabor del café y te aseguro que quedará más delicioso. Los sabores de concentrarán y le sacará mejor partido a tu taza de café
Muele tu propio café
Bueno, ya te hemos comentado qué tan importante es el café en sí mismo para preparar una buena taza de él. El problema con las bolsas de café que se compran por allí es que al ser tan procesado se pierde el sabor y lo delicioso que llega a ser un café natural. Por ello es que una alternativa es comprar los granos enteros.
Y de seguro que te estarás preguntando “Pero, ¿cómo va a ser? ¿Y cómo lo muelo? Pues no vas a necesitar demasiadas cosas para ello. Podrías colocar tu café en un procesador de alimentos o una licuadora bastante potente. Así podrás moler el grano y se despedirá un delicioso aroma. Recuerda moler solo lo que te vas a tomar.
Utiliza la cantidad correcta de café y agua
Esto puede que parezca un poco redundante y sobreentendido, pero la verdad es muy importante. Las proporciones de agua y café son dos parámetros a los cuales se les tiene que prestar suma atención en todo momento. Si no es así, terminará siendo un desastre. Lo cierto es que difícilmente a la primera se le agarra el toque.
En ocasiones el café y el agua se coloca “a ojo” unas cucharadas de café con un poco de agua. Realmente si se hace así no hay seguridad que salga de cierta manera, un día puedes colocar más agua y otro menos café y terminará muy fuerte o sin sabor. Así que ve midiendo todos los días las cantidades.
Reglas específicas no existen, pues como te comentábamos anteriormente, en cada lugar del mundo se toma diferente. En algunos sitios es mucho más fuerte y oscuro, pero en otros es más suave y claro, dependerá de tus gustos.
Cuida la cantidad de azúcar que agregas
Existen dos tipos de personas, las que le colocan azúcar al café y las que no. Los primeros suelen ser muy criticados por los segundos precisamente por alterar el sabor original del producto. Los que no suelen colocarle azúcar al café prefieren su sabor amargo y disfrutan cada una de sus notas, pero para los que agregan azúcar es impensable este sabor.
Si eres de los que desean incorporar azúcar, lo que te recomendamos es que no te pases demasiado. Puede que termines inundando tu café con el sabor dulce y la base, que es el sabor del café se pierda. Debes respetar el sabor del café para que así lo puedas disfrutar.