El sushi, ese súper-alimento que siempre ha estado presente, vuelve a popularizarse gracias a sus insuperables propiedades nutricionales. Tanto es así, que supermercados y restaurantes a domicilio no dudan en poner a disposición de los comensales raciones para disfrutarlas.
Dos factores que describen bien la vida hoy en día son la velocidad y la calidad. Efectivamente, ante las constantes demandas académico-laborales y la búsqueda de ocio, resulta inevitable que todo cuanto nos rodea se agilice de manera exagerada, sumándose a esa rapidez los propios hábitos de vida.
Si bien todo debe transcurrir con la suficiente fluidez como para que dé tiempo a todo, la comida parece ser la más perjudicada, puesto que, en la mayoría de ocasiones, rapidez es sinónimo de peor calidad en la dieta, dado que se recurre a precocinados, bollería y, cuando no, incluso a saltar comidas.
En esta oleada de desenfreno en la que la salud es la peor parada, surge un ápice de esperanza capaz de marcar un stop para el cuerpo y la mente o, al menos, para el paladar y las arterias.Este nuevo aliado no es ni más ni menos que el ya conocido sushi, ese aliado que siempre ha estado ahí y nunca mejor dicho, porque el sushi es tan antiguo que se remonta al siglo IV a.C.
Ya no es que tenga un sabor envolvente y atractivo, sino que resulta una forma cómoda de aportar proteínas de alta calidad nutricional y ácidos grasos omega 3, puesto que sus principales ingredientes son el pescado y el marisco. Además, el arroz y las verduras son fuente de carbohidratos, muy importantes para reponer los depósitos de energía del cuerpo y para aportar glucosa al cerebro.
Muchos escépticos han criticado por mucho tiempo el consumo de sushi al verlo como un aporte excesivo de carbohidratos, pero la realidad es que este consumo es beneficioso para el organismo, puesto que ayuda a disminuir el uso de aminoácidos ante grandes gastos energéticos, lo que se traduce en que el organismo hace uso de los depósitos grasos en lugar de degradar la proteína muscular.
Considerando que, además, el pescado posee una fuerte acción saciante, al igual que las algas (también una fuente interesante de proteína vegetal), es extraño que se produzca una sobreingesta de sushi.
Ante todos estos beneficios, a los que se añade la facilidad y rapidez con la que se pueden degustar las piezas de sushi, no es extraño que se hayan popularizado las sushi boxes.
¿Qué son las sushi boxes?
Probablemente las hayas visto en tu supermercado de confianza. Las sushi boxes son bandejas de sushi que contienen la ración indicada para una persona. Por lo general, estas raciones contienen las piezas más conocidas de este súper-alimento:
- Makis: Es el tipo de sushi clásico, de forma circular, rodeado por alga nori y con relleno, bien sea de pescado, marisco, aguacate o pepino.
- Nigiri: Consistente en una base alargada de arroz sobre la que se dispone una rebanada de pescado, marisco o verduras.
- Temaki: Es menos habitual, pero algunos restaurantes los incluyen en sus menús. Se trataría de un maki en versión cónica, relleno de marisco, atún rojo o verduras.
- Uramaki: Es similar al maki y uno de los más consumidos en los buffet libres. Los urumakis son los que en lugar de estar rodeados por el alga nori, incluyen esta en su interior y en el exterior tienen una cobertura de sésamo, zanahoria, salmón u otras semillas.
Además de los disponibles en las tiendas, es posible encargar a domicilio sushi boxes recién preparados en auténticos restaurantes japoneses, lo que a la hora de la verdad garantiza que el pescado y el marisco estén frescos. Es posible realizar encargos en plataformas de delivery como just-eat.es, para restaurantes como Sushi Shop, de forma que piezas recién preparadas al más puro estilo japonés puedan ser degustadas en tiempo récord y con todos los beneficios nutricionales de sus ingredientes.