El masaje erótico: Desmontando mitos

El masaje es una tradición milenaria, reconocida por sus propiedades sanadoras tanto físicas como mentales. Su uso ha sido fuertemente extendido por todo el mundo, surgiendo distintas modalidades entre las que se encuentra el masaje erótico.

A pesar de que existen muchos mitos en lo concerniente a esta técnica, merece la pena desmontarlos como se hará a continuación, ya que los tabúes no hacen sino despojar a buena parte de la sociedad de una serie de beneficios que todo buen sexólogo catalogaría como imprescindibles para una óptima salud integral.

Sobre el masaje erótico y sus beneficios

El masaje propiamente dicho, surgió en la antigua China en el año 2700 a.C. Si bien sus fines eran relajantes y terapéuticos, las personas en algún momento se dieron cuenta de que más allá de los simples poderes sanadores producidos por el contacto físico, había un componente de placer que los inducía a repetir la experiencia.

Así, en la cuna de Asia, fueron desarrollándose técnicas de masaje que iban más allá del cuerpo físico, fijando su atención en los puntos energéticos o chakras. Según se consideraba, mediante la liberación de estos chakras, la energía era transmutada, logrando elevar el espíritu.

Pero la cosa no quedó ahí, tras identificar 7 chakras que están alineados desde la base de la columna vertebral hasta el vértex, se comenzó a investigar cómo combinar sus características para lograr una experiencia que realmente tuviese unos resultados sanadores, dando lugar al llamado masaje tántrico, que toca cada uno de los chakras tanto de manera directa como combinada, despertando todas sus propiedades al unísono:

  • Chakra Raíz. Control de los instintos y preservación de la estabilidad.
  • Chakra Sacro. Canalización de la energía sexual, así como de las emociones y la pasión.
  • Chakra Plexo solar. Desarrollo de la personalidad intra e interpersonal.
  • Chakra Corazón. Apertura a la conciencia auto-reflexiva y en último término al amor más puro y elevado hacia uno mismo y los demás.
  • Chakra Garganta. Unión del verbo y la razón, así como de la claridad y la apertura al conocimiento.
  • Chakra Tercer ojo. Equilibrio entre lo material y lo espiritual.
  • Chakra Corona. Mantenimiento de la paz y el equilibrio absoluto.

No obstante, como suele pasar, la práctica dio lugar a desambiguaciones del masaje tántrico, dado que, en función de las escuelas, hay expertos que consideran más interesante centrarse en unos chakras que otros.

Ante la idea de que el chakra sacro suele ser el más afectado por las energías negativas externas, surgieron los masajes eróticos, puesto que una sexualidad y una sensualidad mal transmutadas implicarían un desequilibrio del organismo en su totalidad. Por lo tanto, abrir el chakra sacro o sexual implicaría un alivio y una sensación de plenitud auténtica.

El masaje erótico en la práctica

Más allá de la teoría, el masaje erótico se trata de una terapia de restauración frente al malestar acumulado a causa de la rutina y las obligaciones.

El exceso de exigencias al que cualquier adulto medio se ve expuesto, da lugar inevitablemente a un estado de ansiedad y estrés prolongado, que de no ser tratados de forma adecuada pueden desembocar en graves enfermedades orgánicas y psicológicas.

A esto se suma que la sociedad es innegablemente individualista, proyectando sujetos tristes y ansiosos de calor humano. El ser humano es un animal y social y, como tal, precisa de interacciones y contacto físico para sentirse pleno.

Llevado todo esto nuevamente a la teoría, la búsqueda de contacto humano no es sino una forma en la que el cuerpo avisa de su bloqueo energético. Debido a la naturaleza humana, resulta necesario servirse de otros para activar las fluctuaciones energéticas y hallar los puntos de presión justos para rebajar la tensión.

Los beneficios del masaje erótico

Un masaje erótico no consiste simplemente en tocar, se trata de un proceso realizado por profesionales, que trasciende al tacto, involucrando todos los sentidos. Los masajistas especializados conocen las técnicas ancestrales de masaje tántrico con el fin de liberar el chakra sacro y permitir al cliente abrirse a un estado de plenitud y conexión consigo mismo.

Cada parte del cuerpo es erógena por definición, por lo que mediante el despertar de los cinco sentidos se logrará relajar hasta la última fibra del cuerpo, pero eso no queda ahí, ya que la importancia de los masajistas expertos radica en el efecto sanador que logran sobre la mente.

El contacto físico tiene, por un lado, un efecto electrizante al fundir el calor de dos cuerpos, provocando una relajación de los distintos grupos musculares y una depuración de la energía, pero por otro lado limpia el interior de las personas.

Los masajes eróticos mejoran la autoestima y el humor, al tratarse de una terapia cercana, cariñosa y personalizada. Además, de fomentar el autoconocimiento y la propiocepción, generando una ubicación, en la que los problemas del mundo exterior se desvanecen, importando únicamente el estar presente en el aquí y ahora.Por todos estos motivos, vale la pena desvincularse de los tabúes y la sensualidad reprimida, ya que del mismo modo que no existe reparo en ir al médico, no debería haberlo para acudir a un masajista de confianza, cuyos conocimientos y experiencia logren restaurar el equilibrio y aliviar frente al malestar acumulado.